Nuestra Historia es tu Historia
Nuestra historia es un viaje de generaciones, donde cada paso ha sido guiado por la pasión y el arte del calzado. Desde nuestros inicios hasta hoy, hemos fusionado tradición e innovación, creando una herencia única que continúa evolucionando a través de nuestro legado.
La Fundación e Inicios del Oficio allá por:
1878. Descubre el Legado Familiar en el Arte de la Zapatería.
En el albor de 1878, se erige la estirpe de las zapaterías Goñi, con Gil Goñi Reparaz, inscrito como “Zapatero con taller” en la venerable Pamplona. Este bastión de la tradición artesanal, con manos hábiles y corazón entregado, legó su sabiduría y su fervor por la excelencia a su hermano Pablo.
Primeros Establecimientos
En la calle Pozoblanco nº 12, nació el primer taller, que pronto se vio acompañado por la distinguida zapatería “La Buena” en la Plaza del Castillo. Allí, cada par de zapatos, una obra maestra de solidez, elegancia y precios sin rival, era ofrecido con orgullo.
Reconocimiento en el Siglo XX
Heredero del noble oficio, Pablo Goñi Reparaz, con ímpetu y visión, llevó el taller a nuevos horizontes de excelencia. En 1914, la majestad de su trabajo fue coronada con un Diploma de Honor en la Exposición Internacional de Madrid, un tributo a la incomparable calidad de su calzado.
Evolución y Expansión
Aferrados aún al ancestral sistema gremial, 48 artesanos laboraban, produciendo diariamente 70 pares de zapatos de insuperable calidad. La sede del taller y la zapatería, ahora bajo el nombre “Calzados Reparaz”, encontró su nuevo hogar en la calle Hilarión Eslava.
Auge Económico y Crisis (1917-1924)
Vivieron un florecimiento económico, con las ventas escalando de 151.000 a 309.000 ptas entre 1917 y 1920. Sin embargo, la postguerra trajo consigo una crisis, un revés que los llevó de vuelta a los números anteriores en 1924.
Innovación y Nuevas Líneas de Negocio (1924)
La sagaz segunda generación, en un alarde de ingenio, sumó al negocio una fábrica auxiliar de “tarugos” para hormas de calzado, aprovechando la generosa naturaleza de los hayedos de Navarra. Esta audaz innovación marcó un nuevo capítulo en la creación de calzado de indiscutible calidad.
Transición Industrial
El siglo XX, con sus vientos de cambio, trajo consigo el desafío de las máquinas modernas, transformando el arte artesanal en un entramado industrial. Los talleres, cimientos de una era pasada, se vieron compelidos a adaptarse o desvanecerse ante la nueva competencia.
Apuesta por el Cambio
La incorporación de cuatro valientes de los diez hijos de la familia y el inquebrantable apoyo de Pablo Goñi Gainza, el primogénito, fueron el faro que guió al negocio familiar a través de las turbulentas aguas del cambio, abrazando con valentía las transformaciones necesarias en producción y gestión.